viernes, 30 de noviembre de 2007

ACOLITADO

¡Hola a todos!
Con gran alegría os comunico que el próximo día 15 de Diciembre seremos instituidos acólitos once seminaristas. Se trata de un pequeño paso –pero importante – hacia el sacerdocio. En este ministerio, la Iglesia te encomienda el tesoro más grande que tiene: la EUCARISTÍA. Y este regalo tan hermoso se nos hace el tercer domingo de Adviento, con ese sabor tan especial a Navidad.
Yo, por mi parte, os uno a todos vosotros en mi acción de gracias a Dios. Él, que es muy bueno, sabrá pagaros todo el bien que hacéis y las oraciones que dirigís. ¡Que María Inmaculada cuide de todos!

Beatos Francisco y Miguel,
¡¡Rogad por nosotros!!
Valentín

miércoles, 28 de noviembre de 2007

SALIR DEL AGUJERO (Segunda Parte)


...
- Cuando hables de tu novia con tus amigos evita la terminología culinaria o troglodita: Fulanita no "está buena" porque no es objeto de consumo. Te sugeriría dos docenas de alternativas, pero sonarían un poco antiguas. Seguro que tú mismo sabrás inventar otras. Sé creativo.- No toleres la blasfemia en tu entorno. Si la atmósfera se pone apestosa, basta con una frase ingeniosa y contundente, como la que empleó mi amiga Natalia hace años: " oye, tío, ¿por qué no insultas a tu padre y dejas al mío en paz?" Natalia tiene una voz aguda y un tanto chillona. A su "amigo" se le atragantó la pepsi.
- Y si el estudio de la tele se convierte en un zoo, en un catre o en un retrete(sin perdón, que así se llama), tira de la cadena y coge un libro. O refúgiate en la 2, donde los animalitos son más limpios y honrados.
- Manda un mail a tu periódico, a tu emisora o a tu columnista favorito, sobre todo cuando hacen las cosas bien. Levántales el ánimo, que buena falta hace.
- Utiliza Internet sin miedo y echa la red -es decir la web- para pescar: participa en los debates, da doctrina, difunde los links cristianos. Forma un grupo de amigos cibernautas y llévales el mensaje de Jesucristo.
- Pero no te olvides de poner un filtro para que no entre en casa la basura cibernética. No se trata sólo de proteger a los niños. Los adultos estamos igual de indefensos porque todos somos corruptibles y capaces de las mayores aberraciones. Si tuvieses siempre sobre la mesa un montón de revistas pornográficas, ¿estás seguro de que nunca echarías una ojeada?
- ¿Y que ocurriría si, sobre esa mesa de trabajo, hubiese una imagen de la Virgen? A Luisa, cuando la puso por primera vez en su oficina, se la rompieron.Volvió a poner otra, y la pintarrajearon. La tercera fue sustituida por una foto pornográfica...; pero la guerra no duró mucho. Desde hace más de un año nadie toca su imagen de la Virgen de Guadalupe. Y su amiga Marijose ha puesto otra.
- En tu casa, piso o apartamento también podrías poner un buen cuadro de Santa María. Es fácil encontrar uno que sintonice con su estilo: los hay para todos los gustos.
- Quítate ese colmillo de gorila que llevas al cuello. Cualquiera diría que se lo arrancaste a una amiga de la infancia. Una medalla-escapulario es mucho más práctica. Ahora muchos chavales se cuelgan el rosario como si fuera un collar. Aprovecha la ocasión para explicarles cómo se usa.
- Visita a tu párroco alguna vez. Necesita sentir el afecto de sus feligreses. Dales ideas, cuéntale el último chiste, fumaos un pitillo juntos (con permiso de la ministra), y escúchale, que a veces está muy sólo.
- En el cestillo de la Misa echa papel moneda. La calderilla está bien para las propinas o los parquímetros, pero en la Iglesia necesitan algo más que las sobras. Y en el mes de junio pon la equis donde tú sabes.
- En verano, llévate a Jesús de vacaciones. Él solía ir también a la montaña y a la playa. Y comía pescado a la brasa al anochecer. Aprende a descansar a su lado, sin huir. No lo mandes a un asilo ni lo abandones en la primera gasolinera.
- Habla de Dios a tus amigos. "Hablar de" es hablar de uno mismo, de lo que Él ha hecho contigo. Por eso cuesta. Hacer apostolado es quedarse a la intemperie, pero vale la pena.
- Y si es necesario, sal a la calle con una pancarta. Algunas veces los cristianos tenemos que manifestarnos, hacer bulto y gritar fuerte, llenando las avenidas y las plazas de las grandes ciudades. No quemes papeleras ni estropees el mobiliario urbano. Lleva a los viejos y a los niños, que somos gentes de paz y no correrán riesgos.
FIN

lunes, 26 de noviembre de 2007

SALIR DEL AGUJERO (Primera Parte)



No hablo de salir del armario para evitar equívocos; pero es cierto que hay demasiados cristianos voluntariamente escondidos en un agujero; católicos apocados que ocultan su fe como si se tratara de una neurosis y viven en su gazapera, aconejados, sin atreverse a enseñar la oreja. Les han dicho que la fe es algo íntimo y personal; que han de ser respetuosos incluso con los que no lo son. De acuerdo; pero también el embarazo es íntimo y se luce con orgullo sin el menor recato. Tal como se están poniendo las cosas lo católicos tenemos la obligación de dar la nota. Cuando el silencio se interpreta como aquiescencia, es un deber moral dar la cara, y, sin agredir a nadie, cantar las cuarenta al lucero del alba.¿Y qué haremos para salir del agujero? ¿Cómo daremos la nota? Mi amigo Kloster, que es un hombre sabio y no tiene pelos en la pluma, dictó estas sabias recetas que transcribo sin más preámbulos:
- Cuando vayas de turista a una catedral, saluda ante todo al Dueño y Señor de la casa, que vive en la Capilla del Santísimo. No te limites a admirar las vidrieras. No olvides que las iglesias son Sagrarios, no meros edificios de interés cultural.
- No te importe quedar con tus amigos "después de Misa". A lo mejor alguno se anima y queda contigo "antes".
- Limpia y enriquece tu lenguaje. Nada tengo contra el taco como interjección lírica, que, usado con moderación, sosiega el ánimo; pero la mugre sobra. ¿Para qué tantas referencias glandulares, tanta alusión al presunto oficio de la madre de un tercero, tanta basura sexual? No sé si la cara es el espejo del alma (espero que no), pero el idioma sí que lo es.
- Y hablando del lenguaje, no es preciso que digas "Jesús" cada vez que oigas un estornudo, pero habrá que poner de moda algunas viejas y entrañables expresiones: "si Dios quiere", "con la ayuda de Dios", "adiós" ... Sustituirán con ventaja al "hasta luego" que todo el mundo profiere aunque se despidan para la eternidad.
- Di a tu novia que se tape el ombligo y sus alrededores; que prefieres mirarla a los ojos, porque es lo único que no envejece. A lo mejor se ruboriza de gusto. Y tú, no es preciso que exhibas la etiqueta de tu ropa interior. Esos pantalones, que ya utilizaba Cantinflas hace cincuenta años, francamente, son una horterada.
- Cuando empieces a salir con una "niña supermona" (o un "niño supermono"), pregúntale qué piensa sobre Dios, la Iglesia, la familia, los hijos... Y no olvides que, en el noviazgo, es más importante conocerse que tocarse.
- Si vas al restaurante un viernes de cuaresma, pide al camarero que te enseñe el menú de vigilia. Si no lo entiende, llama el chef y se lo explicas. Y, antes de comer, bendice la mesa. Si se dan cuenta los vecinos, mejor para ellos.
- Cuando estés de viaje y llegues al hotel en una ciudad desconocida, di en recepción que te informen sobre los horarios de Misas de las iglesias más cercanas. Si son buenos profesionales, harán la gestión sin mover un músculo. Cosa más insólitas les piden cada día.
Continuará.....

sábado, 17 de noviembre de 2007

martes, 13 de noviembre de 2007

La Confianza depositada en Dios

A continuación os presentamos una carta que escribió Bartolomé Blanco a su familia el día antes de ser fusilado. Bartolomé es un beato, de los cuales beatificaron en Roma el pasado 28 de Octubre, era cooperador salesiano y murió fusilado a los 21 años el día 2 de Octubre de 1936, mientras decía: ¡ Viva Cristo Rey!

Ojala esta carta nos enseñe a depositar nuestra confianza en Dios hasta en el momento de nuestra muerte y que nos ayude a darnos cuenta de que Jesús siempre está con nosotros, incluso en los momentos más duros de nuestras vidas.
Esperamos que os guste y, que nos ayude a todos a acrecentar y fortalecer nuestra fe.
- Carta a su familia:
(Summarium super maryirio, pp. 425-426)
Prisión Provincial. Jaén, 1 de octubre de 1936.
QUERIDAS TÍAS Y PRIMOS: Cuando me faltan horas para gozar de la inefable
dicha de los bienaventurados, quiero dedicaros un último y postrer
recuerdo con esta carta.

¡Qué muerte tan dulce la de este perseguido por la justicia! Dios me hace
favores que no merezco proporcionándome esta gran alegría de morir en
su Gracia.

He encargado el ataúd a un funerario y arreglado para que me entierren
en nicho; ya os comunicarán el número de dicho nicho.
Hago todas estas preparaciones con una tranquilidad absoluta; y claro está
que esto, que sólo puede conseguirse por mis creencias cristianas, os lo
explicaréis aún mejor cuando os diga que estoy acompañado de quince
Sacerdotes, que endulzan mis últimos momentos con sus consuelos.
Miro a la muerte de frente, y no me asusta, porque sé que el Tribunal de
Dios jamás se equivoca y que invocando la Misericordia Divina conseguiré
el perdón de mis culpas por los merecimientos de la Pasión de Cristo.

Conozco a todos mis acusadores; día llegará que vosotros también los
conozcáis, pero en mi comportamiento habéis de encontrar ejemplo, no
por ser mío, sino porque muy cerca de la muerte me siento también muy
próximo a Dios Nuestro Señor, y mi comportamiento con respecto a mis
acusadores es de misericordia y perdón.
Sea esta mi última voluntad: perdón, perdón y perdón; pero indulgencia
que quiero vaya acompañada del deseo de hacerles todo el bien posible.
Así pues, os pido que me venguéis con la venganza del cristiano:
devolviéndoles mucho bien a quienes han intentado hacerme mal.

Si alguno de mis trabajos (fichas, documentos, artículos, etc.) interesara a
alguien y pudieran servir para la propagación del catolicismo,
entregárselos y que los use en provecho de la Religión.

No puedo dirigirme a ninguno de vosotros en particular, porque sería
interminable. En general sólo quiero que continuéis como siempre:
comportándoos como buenos católicos. Y sobre todo a mi ahijadita tratarla
con el mayor esmero en cuanto a la educación; yo, que no puedo cumplir
este deber de padrinazgo en la tierra, seré su padrino desde el cielo e
imploraré que sea modelo de mujeres católicas y españolas.

Si cuando las circunstancias lleguen a normalizarse podéis, haréis lo
posible porque mis restos sean trasladados con los de mi madre; si ello
significa un sacrificio grande, no lo hagáis.

Y nada más; me parece que estoy en uno de mis frecuentes viajes y espero
encontrarme con todos en el sitio a donde embarcaré dentro de poco: en
el cielo.
Allí os espero a todos y desde allí pediré por vuestra salvación. Sírvaos de
tranquilidad el saber que la mía, en las últimas horas, es absoluta por mi
confianza en Dios.

Hasta el cielo. Os abrazo a todos.

Bartolomé.

martes, 6 de noviembre de 2007

Ahora di, que tu vida es una mierda


¿Cuántas veces habremos oído esa expresión?

Supongo que esta foto es suficiente para pararnos a reflexionar un poco.A lo mejor no merecen tanta importancia las "cosas malas" que nos pasan, a lo mejor hay gente pasándolo mucho peor y al fin y al cabo, sin quejarse tanto, lo nuestro, salvo alguna excepción, no son problemas, problemas son los que ellos tienen.


Aunque las palabras sobran, porque la foto lo dice todo.